progressif

lunes, abril 30, 2007

Extremos de la derecha fascista






Tomados de La Jornada, Hernández, El Fisgón y Rocha y El Universal, Naranjo y Helioflores.

De nueva cuenta es palpable la doble moral y doble discurso de los poderes fácticos en México. Cuando algo no les conviene, no está en línea con sus intereses económicos o la forma en que mantienen el control de los mexicanos, hacen señalamientos contrarios a lo que han manifestado anteriormente.

El llamado del cardenal Norberto Rivera Carrera a desobedecer las leyes en México, bajo la premisa de que son leyes “inmorales”, no es más que una forma de violentar lo que ellos mismo califican como “Estado de derecho”. De esta manera vulneran lo que ellos dicen defender: un país de leyes.

Si fuera cierto que no se deben acatar leyes contrarias al bien común o que vulneren las garantías y derechos humanos de los habitantes del país. El cardenal –acusado en Estados Unidos por violar las leyes de ese país al proteger al sacerdote Nicolás Aguilar, señalado por de violar a mas de 90 niños en México y allá- debería pronunciarse contra leyes como la del IPAB, que propicia el empobrecimiento y muerte de mexicanos al no poder utilizar esos millonarios recursos en el desarrollo del país y en el sector salud. No hay medicinas en ninguno de los sistemas de salud públicos del país. Vamos ni siquiera aspirinas en muchos de los casos.

También ya hubiera puesto el grito en el cielo por la brutal desigualdad prohijada por sus amigos, los Slim, los Servitje, los González Barrera, los Azárraga, los Salinas Pliego y una larga lista de políticos-empresarios-transas. Una plaga apocalíptica que mantiene en la pobreza a más de la mitad de los mexicanos. Lo que ocasiona miles de muertos al año y daños irreversibles en el desarrollo de millones niñas y niños, por la desnutrición.

Quienes deberían poner el ejemplo de serenidad y bondad –se supone que estudiaron y siguen los evangelios, que norman su quehacer y conducta- recurren a extremos verbales de llamar a quien no piensa como ellos: “dictadorzuelo” y otras linduras. Sólo recordemos que a quien se dirigió la descalificación fue al jefe de gobierno de la Ciudad de México, elegido por la mayoría de los habitantes del Distrito Federal de manera democrática, algo de lo que no pueden presumir ni Norberto Rivera Carrera ni su vocero, Hugo Valdemar.

Norberto Rivera afirma que: "Ninguna circunstancia, ninguna finalidad, ninguna ley en el mundo podrá jamás hacer lícito un acto que es intrínsicamente ilícito, porque es contrario a la ley de Dios, escrita en el corazón de todo hombre, reconocible por la razón misma, y proclamada por la Iglesia". ¿Esa misma declaración no cabe en los ejemplos antes expuestos? ¿Entonces porqué ninguna declaración de la Iglesia al respecto?

A la par de estos sucesos los empresarios –otros de lo que realmente mandan en México- llaman a que los trabajadores no utilicen su derecho a la libre manifestación y a hacer patente su descontento con los bajos salarios, el desempleo, el aumento en el costo de la vida y la violencia incontenible del crimen organizado.

El presidente de la Coparmex –que aglutina a los amigos del cardenal Rivera Carrera-, Ricardo González Sada llamó a ''a la cordura y a la racionalidad de la población para que no se deje llevar por propuestas que claramente van en contra del bien de los mexicanos''. Además convocó ''a los líderes y a los formadores de opinión (a la televisirón y radio paleros del usurpador Felipe Calderón Hinojosa) para que se manejen con honestidad intelectual y vean realmente si podemos mantener o cambiar estas situaciones''.

Días antes Tomás Natividad, presidente de la comisión laboral de la Coparmex, amenazó con despedir a los dirigentes que promuevan y lleven a cabo el mencionado paro laboral del próximo 2 de mayo por violar el artículo 47 de la Ley Federal del Trabajo.

Es decir que mientras la Iglesia católica llama a desobedecer las leyes del país por otro lado, quienes utilicen su derecho a la libre manifestación –garantizado en la Constitución- podrían perder su empleo, a criterio de los empresarios. Bonito “Estado de derecho”.


La siguiente es una nota tomada del diario La Jornada.







Sitiaremos varias ciudades el 2 de mayo, dice la CNTE

Protestará con otros sindicatos contra la Ley del ISSSTE

KARINA AVILES

La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), en conjunto con otros sindicatos, advirtió que el próximo 2 de mayo ''sitiará'' las principales ciudades del país mediante un paro y bloqueos a carreteras, casetas de peaje, acciones en las fronteras, la suspensión de actividades en escuelas y la toma de las delegaciones de los sectores Salud y Educación, para que se dé marcha atrás a la reforma a la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).

Asimismo, anunció que hoy se hará la entrega de cerca de 100 mil amparos contra la citada ley, que fueron transportados a la ciudad de México en tres camiones.

También, a partir de las ocho de la mañana de este lunes instalarán carpas a las afueras del Palacio de Justicia Federal, en San Lázaro, para que en un plazo de dos semanas quienes no han hecho su solicitud de amparo acudan a este lugar con el propósito de que puedan ser apoyados con los formatos y la asesoría jurídica para presentar ese recurso.

Luego de la instalación de estos módulos declarará la integración del consejo nacional de huelga en defensa de la seguridad social.

En conferencia de prensa en la que participaron integrantes de los sindicatos Mexicano de Electricistas (SME), de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (STUNAM), Independiente de Trabajadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (SITUAM) y del Instituto Nacional de Antropología e Historia, Artemio Ortiz Hurtado, secretario de la sección 18 de la CNTE en Michoacán, advirtió que ''todo el país estará sitiado'' el próximo miércoles, con una serie de medidas entre las que se incluyen las ''visitas a bancos'' y a trasnacionales como Wal- Mart.

Aseguró que tomarán las delegaciones estatales de la Secretaría de Educación Pública e ISSSTE, aunque aclaró que en clínicas y hospitales no impedirán las labores.

Por su parte, integrantes del STUNAM se sumarán a este paro nacional de labores, programado para el 2 de mayo. Ese día, desde temprana hora bloquearán los accesos a Ciudad Universitaria y otras instalaciones de esa caa de estudios.

Pilar Saavedra, de la Coordinadora de Trabajadores en Resistencia, entregó un documento con los resultados de la consulta realizada por todas las corrientes de oposición para conocer si apoyan a los trabajadores. De acuerdo con el recuento, 83.38 por ciento apoyó el paro de actividades, aunque si se contabiliza a los trabajadores que en sus asambleas votaron por unanimidad, sumaría un total de 5 mil 671 votos en favor.

Durante la conferencia, el secretario general del SITUAM, Jorge Ramos, recordó que el ISSSTE tiene alrededor de 2.5 millones de trabajadores en activo y el número de amparos que interpondrán rebasará todo tipo de expectativas. El profesor Esteban Ojeda Ramírez, secretario de Promociones Económicas de la sección 3 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación en Baja California Sur, dijo que tan sólo ellos entregarán hoy 2 mil amparos y de igual forma se sumarán a la paralización de actividades en aquella entidad.

Fernando Amezcua, del SME, afirmó que ''peligrosamente nos acercamos a 2010 en condiciones muy adversas. Por ello, este es un aviso para que el gobierno se detenga, porque de lo contrario encontrará la fuerza de los trabajadores''.

Posteriormente, la CNTE sostuvo una asamblea donde las distintas representaciones rindieron un informe de los preparativos para este 2 de mayo, y hasta el cierre de esta edición discutían la fecha del estallamiento del paro nacional, pero con carácter de indefinido. La tendencia era iniciar esta acción a partir del próximo 7 de mayo, aunque se informará de ello esta misma semana.

domingo, abril 29, 2007

El violín y la carreta*



Tomados de La Jornada, Hernández y El Universal, Naranjo.


Carlos Bonfil


La intención declarada de los productores de El violín, de Francisco Vargas, no ha sido generar polémica, pero a estas alturas ese discreto propósito ha sido muy rebasado. La cinta ha conquistado más de 30 premios internacionales y tres Arieles en México; ha tenido una corrida comercial exitosa en Francia y a mediados de mayo se estrena en España, donde seguramente tendrá muy buena acogida. Sobre todo, al cabo de varios meses, ha conseguido imponerse en la cartelera capitalina, luego de que primero fue ignorada por distribuidoras que tal vez deseaban evitar incómodas polémicas; después fue rescatada por la productora -y hoy también distribuidora, Canana Films, de Pablo Cruz y los actores Diego Luna y Gael García Bernal-, y apoyada finalmente por la revista Proceso y por periodistas e intelectuales que comienzan a discutir en sus columnas uno de los temas que toca la película (los abusos del Ejército Mexicano contra los pueblos indígenas), el cual también se aborda en debates públicos, como el llevado a cabo hace tres días en la UAM Xochimilco, donde el inhabilitado general Francisco Gallardo evocó, incluso, la posibilidad de una censura castrense. Por si esto fuera poco, la película se estrena en un momento político delicado; por un lado, siguen sin esclarecerse las circunstancias del fallecimiento de la anciana campesina Ernestina Ascensión, presuntamente violada por elementos del Ejército, y por el otro, acaban de aprobarse en el Senado de la República reformas a los códigos penales que abren la puerta al hostigamiento de luchadores sociales, quienes desde ahora pudieran ser acusados de terroristas.

El violín, cinta reseñada en este espacio el 31 de diciembre pasado, en sus crudas escenas iniciales derriba el tabú que impedía representar al Ejército Mexicano como algo más que una noble institución al servicio del bienestar público, particularmente en el campo. Se recordará la polémica que en 1989 suscitó la tímida intención de presentar a las fuerzas armadas como responsables de la matanza de Tlatelolco en Rojo amanecer, de Jorge Fons, la mutilación de escenas incómodas, el escamoteo de la realidad histórica y la autocensora solución fílmica del "contracampo impedido" (Jorge Ayala Blanco), que dejaba fuera de la pantalla la imagen de soldados reprimiendo a los estudiantes. Todo esto ha quedado muy atrás. El violín inicia su relato con imágenes tan brutales y directas como la realidad que describe: en una época indeterminada, aunque muy clara para cualquier espectador mexicano, una población indígena es humillada y torturada por un poder autoritario. Un anciano, don Plutarco (don Angel Tavira, novel actor octogenario y magnífico), campesino y violinista manco, seduce con su música al capitán encargado de la faena represora. Mientras tanto, la guerrilla organiza la resistencia armada, y don Plutarco colabora en el esfuerzo rescatando armas y municiones que esconde y transporta en el estuche vacío de su instrumento. Su aparente fragilidad y respetabilidad de anciano inofensivo consiguen engañar por un tiempo a los militares. El resto es una estupenda trama de suspenso y un relato de lirismo inusitado, filmado en blanco y negro, con una fotografía preciosista que tiene como buen contrapunto la sobriedad de las actuaciones (Dagoberto Gama y Gerardo Taracena), así como la presencia vigorosa del anciano más entrañable en el cine mexicano de las últimas décadas.

De esta cinta se hablará durante mucho tiempo, por lo que apenas importa su duración real en cartelera. Se distribuirá masivamente en video y continuará reconociéndosele en el extranjero. "En El violín está el futuro del cine mexicano", sentencia Guillermo del Toro -y no en Hollywood, añadiríamos. Por lo pronto, una novedosa estrategia de difusión, similar a la practicada por Canana Films en Ambulante -su festival de documentales mexicanos y extranjeros-, planea llevar la cinta por todo el país; primero, en una gira por diversas ciudades, luego en un recorrido por comunidades campesinas en lo que el director Francisco Vargas llama una gran "carreta cinematográfica". Esta semana, El violín se estrena con sólo 20 copias en el Distrito Federal. Se necesita apenas poco más que esto para hacer historia en nuestro cine.

carlos.bonfil@gmail.com


* Tomado de La Jornada, http://www.jornada.unam.mx

sábado, abril 28, 2007

Ejército rezagado






Tomados de La Jornada, El Fisgón, Helguera y Rocha y El Universal, Omar.

jorge carrasco araizaga*


Tomado de la revista Proceso. http://www.proceso.com.mx



México, D.F., (apro).- Sometido a la coyuntura política por decisión del presidente Felipe Calderón, el Ejército Mexicano está, más que nunca, lejos de la modernización que desde hace años reclaman las Fuerzas Armadas de México.

Concentrado en los operativos contra el narcotráfico y en la forma de librar las acusaciones por la muerte de la anciana indígena Ernestina Ascencio Rosario en la sierra de Zongolica, en Veracruz, el alto mando del Ejército tiene poco margen para responder a los cambios que promueven miembros de la propia institución.

La comparecencia del secretario de la Defensa Nacional, general Guillermo Galván Galván, ante la Cámara de Diputados, mostró que la urgencia política le impide al Ejército siquiera reflexionar en torno a propuestas que desde hace años se han planteado para la política de defensa nacional.

Preocupado en responder a la inquietud de los diputados por los asuntos en que el Ejército ha quedado atrapado desde que Calderón lo tiene –junto con la Marina– como su principal aliado político, el general Galván se dedicó a hacer una mera presentación de lo hecho por la Secretaría a su cargo desde hace cinco meses.

Lejos de ser una auténtica comparencia en la que se dé un debate en torno a políticas públicas, la práctica que se sigue en el Congreso mexicano apenas llega a un presentación de los funcionarios que acuden como invitados y no como responsables de una cartera sobre la que tienen que rendir cuentas y transparentar sus acciones.

Por eso no resultó nada extraño que el general Galván haya ignorado por completo el intento de uno de sus excompañeros de armas para empezar a debatir lo que puede ser una nueva política de defensa nacional para México. Fue el general retirado del Ejército, ahora diputado del PRI e integrante de la Comisión de Defensa Nacional, Roberto Badillo Martínez, quien en un intento de darle sentido a la comparecencia hizo algunas propuestas. Pero se topó con una muralla, pues el secretario las pasó totalmente por alto.

Más allá de la polémica de algunas de sus propuestas, el general en retiro lanzó un tema que incomoda a muchos militares en activo: la unificación en una sola dependencia a la Secretaría de la Defensa Nacional y a la Secretaría de Marina.

Ello significaría para México tener un solo mando de Defensa Nacional que para operar requeriría de un Estado Mayor Conjunto, comandado alternadamente por un jefe del Ejército, uno de la Fuerza Aérea y otro de la Armada, como ocurre en muchos países, incluido Estados Unidos.

Por encima de ese Estado Mayor Conjunto, desde luego, estaría el presidente de la República, en primacía del poder civil sobre el militar, propia de los regímenes democráticos.

Además, una sola secretaría representaría ahorros y habría una política articulada para la defensa del país.

Más polémica para el sector civil fue la propuesta del general retirado Badillo para crear “una cuarta fuerza militar”, conocida como Guardia Nacional y habilitada por las Fuerzas Armadas para cumplir tareas como la defensa de las fronteras.

En ese tenor, propuso también la modernización de las defensas rurales, previstas desde hace décadas en la legislación militar. Según el diputado, con esa actualización aumentaría la actividad de inteligencia contra el narcotráfico en el campo.

A lo que no se refirió el diputado fue a la necesidad de revisar también las funciones del Estado Mayor Presidencial, originalmente concebido para la protección del presidente y su entorno familiar, pero que ha derivado en una extensa y costosa carga financiera para los mexicanos, sobre la que no hay ningún tipo de contrapeso.

No les falta razón a quienes lo caracterizan como “un Ejército dentro del Ejército”, pues ni siquiera el secretario de la Defensa tiene control sobre los mandos militares al servicio del presidente.

Tampoco se refirió al pospuesto debate sobre la participación de México en operaciones internacionales de la ONU para el mantenimiento y establecimiento de la paz en zonas de conflicto.

Todas esas propuestas, que están supeditadas a cambios legislativos y hasta ahora sólo se han discutido en la academia, muestran la necesidad compartida ya por algunos militares de que se tiene que hacer una revisión de la manera en que operan las Fuerzas Armadas en México.

En su comparecencia, el general Galván admitió que hay “una preocupación” por la necesidad de que México cuente con una política de defensa nacional, pero “no hay una concretad (sic) precisa”.

En el mejor los casos, lo único que ofreció fueron “las metas del Plan Nacional de Desarrollo en materia de seguridad nacional”, lo que, en la práctica, significa un sexenio más de rezago en los asuntos militares en México. (27 de abril de 2007)

jcarasco@proceso.com.mx



El siguiente artículo fue tomado del periódico La Jornada.







Desfiladero

Jaime Avilés


¿Dónde está Rivera Carrera?



¿Por qué desapareció desde el domingo?

¿Es verdad que rompió con Calderón?

¿Recibirá un alto cargo en el Vaticano?



¿Dónde está el cardenal Norberto Rivera Carrera? El domingo pasado no ofició la misa de 12 en la Catedral Metropolitana, donde se dijo que se había ido a "Roma para tratar diversos asuntos" (La Jornada, 23 de abril de 2007, página 44). Por su parte, una fuente eclesiástica confió ayer a este reportero que ese día, en realidad, le cedió el espacio al obispo auxiliar Marcelino Hernández Rodríguez, porque en esa fecha éste cumplía un año más de su ordenación.

A lo largo de la semana, sin embargo, circularon insistentes rumores en el sentido de que Rivera Carrera no abandonó el país sino hasta la noche del propio domingo, y que el lunes llegó en efecto a Roma, de donde "ya no regresará a México" porque, en breve, el papa Benedicto XVI le dará un importante nombramiento como alto funcionario del Vaticano.

En contradicción con lo anterior, un portavoz de la arquidiócesis primada de México, al hablar off the record con periodistas que cubren esa fuente, deslizó que el cardenal permanece en el país pero que "no está localizable" porque decidió "romper todo contacto" con la Presidencia de la República y la Secretaría de Gobernación, tras el apercibimiento que le hizo la oficina de Francisco Ramírez Acuña por la violencia de sus críticas contra los partidarios de la despenalización del aborto.

Estos son, pues, los datos que prefiguran la existencia de una crisis en el más alto nivel de la Iglesia católica mexicana: tras las amonestaciones que la Secretaría de Gobernación le enderezó la semana pasada, el arzobispo primado de México desaparece de la escena pública: no acude a la misa del domingo en catedral, donde sin proporcionar detalles específicos se informa que "se encuentra en Roma".

Lo demás, las especulaciones, las filtraciones y los rumores, abonan la sospecha de que Rivera Carrera está en el centro de un huracán cuya gravedad no es todavía ponderable, pero que abre dos líneas interpretativas. Una, que al designarlo como alto funcionario del Vaticano, el papa Benedicto XVI estaría reaccionando ante el juicio penal que se desarrolla en un tribunal de California, donde el arzobispo está acusado por encubrir al sacerdote Nicolás Aguilar, que en México y luego en Estados Unidos abusó sexualmente de decenas de niños. En otras palabras, que al hacerlo "caer hacia arriba" asignándole un cargo en el gabinete del obispo de Roma, la Santa Sede impediría que la justicia estadunidense lo sentenciara como cómplice de un violador de menores.

La segunda posibilidad -la de su "rompimiento" con Felipe Calderón y Ramírez Acuña- no tiene pies ni cabeza. No hace falta ser un observador muy agudo para advertir que desde hace varias semanas Rivera Carrera fue perdiendo progresivamente la calma, a medida que el proceso penal de California daba un giro cada vez más desfavorable a sus intereses. Tampoco se requiere de gran astucia para percibir que al emprender su ruidosa campaña contra la despenalización del aborto -o en favor del aborto clandestino que causa la muerte de numerosas mujeres pobres cada año- creyó que la pelota estaba de nuevo en su cancha y recobraría su disminuida autoridad.

Tan seguro se sentía de eso que incluso se permitió hablar contra los pederastas como si no estuviera acusado de proteger a uno de ellos. Pero su táctica, marcada por la desesperación, culminó con un sonoro fracaso. No sólo no impresionó a nadie con sus medievales amenazas de excomunión, ni pudo sacar a las calles a más de tres mil personas -en una ciudad de 20 millones de habitantes-, sino que cometió el error de involucrar al Papa en una batalla que estaba irremediablemente perdida de antemano. Y si ahora, para colmo, rompió con Calderón, ha de estar al borde mismo de un colapso nervioso.

Lo cierto es que al meter a la Iglesia en la coyuntura del aborto para tratar de recomponer su imagen pública, Rivera Carrera ayudó a la ultraderecha a entretener a la sociedad en un debate filosófico, mientras en las cámaras del Poder Legislativo el PRIAN vencía a los diputados y senadores del Frente Amplio Progresista en batallas más trascendentes, como la reforma del ISSSTE, que hará pasar de la pobreza a la miseria a millones de jubilados, o las reformas a diversos códigos penales que mandarán a la cárcel por "terroristas" a los luchadores sociales que ejerzan el derecho constitucional de protestar contra el poder. Ulises Ruiz debe estar felicísimo.

La estrategia estuvo a punto de incluir en el mismo paquete la derogación de la Ley de Neutralidad. Sin embargo, gracias a la movilización inmediata de la resistencia civil, el PRI tuvo que pintar su raya afirmando que no contribuirá a facilitar la participación de México en las guerras de Estados Unidos.

Aunque el tema no está cerrado -el PAN volverá a la carga porque la supresión de esa ley es un compromiso que Vicente Fox contrajo con WC en 2005 y el "gobierno" federal está obligado a respetarlo-, la moraleja de esta semana es obvia: mientras Rivera Carrera buscaba consuelo en Roma, José Luis Soberanes, presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, era vapuleado en la Cámara de Diputados por su abominable actuación en la tragedia de Zongolica.

El denominador común entre ambos personajes es que cayeron en desgracia después de apoyar tramposamente a Calderón: uno por intervenir a gritos y sombrerazos en la polémica del aborto, reviviendo el odio que desataron los pasados comicios, y el otro por hacer suya la tesis, ya insostenible, de que la señora Ernestina no fue violada por miembros del Ejército. Pero si algo coloca en relación de igualdad a Rivera Carrera y Soberanes con el titular del IFE, Luis Carlos Ugalde, máximo responsable técnico del fraude electoral, es que su permanencia en los cargos que detentan sólo le causará más y más problemas al país.

Entre tanto, Maru Guerrero, creadora del pan de caja alternativo llamado Mi General, dijo a Desfiladero que el proyecto seguirá adelante, pero fuera del PRD. "Vamos a seguir trabajando con la sociedad, pero ya no con el partido, porque no queremos que el grupo de Gerardo Fernández Noroña lo termine convirtiendo en una nueva leche Betty", se quejó... Y, cosas de la vida, en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal los mismos diputados perredistas que se cubrieron de gloria al despenalizar el aborto, están impulsando una reforma a la Ley de Espectáculos de la ciudad de México para que en las corridas de toros los jueces de plaza, que representan al gobierno de Marcelo Ebrard, queden sometidos a los caprichos de la mafia que en alianza con Televisa ha destruido la fiesta brava en esta metrópoli. Lo asombroso es que en la movida, seguramente por desinformación, está metido Salvador Martínez della Rocca, el legendario Pino. ¿Por qué?


jamastu@gmail.com

viernes, abril 27, 2007

Represión contra quienes denuncian la corrupción e impunidad que se vive en México







Tomados de La Jornada, Helguera, El Fisgón y Rocha y El Universal, Helioflores y Omar.

La única respuesta del usurpador Felipe Calderón Hinojosa y de la dirigencia fascista del Partido Acción Nacional (PAN) al descontento social generado por décadas de pobreza, inseguridad, inequidad, saqueo y agravado por el fraude electoral de 2006, la impunidad y el descrédito de las “instituciones” es la represión. Ahora, como el los tiempos del PRI, con leyes contrarias al bien común y a la vida.

Ayer se definió en lo legal el rumbo que en los hechos ha sido el sello del pelele: acallar la protesta social con la fuerza pública. Senadores del PRIAN aprobaron una ley para luchar contra el terrorismo-cuál ¿el de Estado?-, misma que implica por su ambigüedad el ataque a la libre manifestación de ideas.

La ley de marras dice que se aplicará a “todo lo que atente contra la seguridad nacional o presione a las autoridades para que tomen una determinación”. Es decir, cualquier manifestación, cualquier lucha social, como en tiempos de los asesinos Gustavo Díaz Ordaz y Luis Echeverría Alvarez, puede caer en esa clasificación, hecha con dedicatoria para la Resistencia Civil Pacífica.

La pena corporal va de 6 a 40 años de prisión, por lo que automáticamente no se tiene derecho a la libertad bajo fianza y se aplica una multa de mil 200 días de salario mínimo. Es claro que va contra las personas de menos recursos, pues es sabido que realizar actos de terrorismo se necesitan fuertes cantidades de dinero, organizaciones etc. Pero en el peregrino caso que se de un hecho de terrorismo en el país, la multa es irrisoria para un grupo terrorista. No lo es para una persona, pues significa casi cuatro años de salario mínimo.

La ley dice: "sin perjuicio de las penas que correspondan por los delitos que resulten, a quien utilice sustancias tóxicas, armas químicas, biológicas o similares (...) explosivos, armas de fuego, incendio o inundaciones, o por cualquier otro medio violento, para producir alarma, terror o temor en la población, para atentar contra la seguridad nacional o presionar a la autoridad para que tome una determinación".

La cosa no queda ahí, también internet entró en el objetivo de la represión. Los “representantes populares” aprobaron modificaciones al Código Penal Federal –aplicable por ello en todo el país- para imponer penas de cárcel de seis meses a seis años de prisión a toda persona que gestione, instale o permita que se instale en un lugar público o en propiedad privada algún dispositivo tecnológico con el propósito de promover, publicar, distribuir o transmitir, en tiempo real o diferido, imágenes o fotografías con contenido sexual, de exhibición corporal o que resulten lesivas a la integridad moral, al honor o a la intimidad, sin el consentimiento expreso de quien o quienes ahí aparezcan.

Es decir, que si alguien se dice agraviado por un video o fotografía publicada en internet, puede iniciar un juicio contra quien realizó el material, lo subió y lo almacena en algún servidor –web hosting-. De esta manera el espurio pretende poner un alto a una actividad que –aunque traten de ignorarlo- cobra cada vez más importancia en la denuncia los atropellos sociales y el saqueo por parte de los grupos de poder .

No es algo menor si tomamos en cuenta que desde la web se organiza la resistencia civil ante el cerco informativo y el bombardeo de desinformación. Cualquier sitio –junto con quien le de hospedaje, o incluso el café internet- puede ser acusado de publicar, promover, distribuir, transmitir imágenes o fotografías que “lesionen” la moral y honor de las personas. Y como esto estará a cargo de la “interpretación” a modo de los jueces, se trata en los hechos de una ley mordaza y de intimidación con dedicatoria para quienes realizamos la tarea de resistir y difundir lo que se oculta en los medios electrónicos y en no pocos impresos.

Recordemos que la ambigüedad de daño al honor ha tenido como consecuencia que se condene a Olga Wornat al pago de medio millón de pesos por “lesionar” el honor de la corrupta Marta Sahagún , por publicar los motivos expuestos al Vaticano para la anulación de su matrimonio religioso. La periodista ahora recurre a tribunales internacionales, porque los mexicanos dieron por “cosa juzgada” el caso a favor de una persona que carece de honor y dignidad. De nada valió al juez que se aportaran pruebas que demostraban que la señora ventiló en espacios públicos –como revistas y programas de televisión- su vida privada. Todos sabemos que así se aplica la “ley” en México.

Otro ejemplo es el caso de San Salvador Atenco, que a un año de la nefasta actuación de la Policía Federal Preventiva y la del Estado de México que cometió violaciones –ocurrida los días 3 y 4 de mayo de 2006- a 27 personas se les ratificó el auto de formal prisión. Cuatro grupos de ellos consiguieron amparos de la justicia federal para que se valoraran las pruebas de descargo, pero por consigna el juez determinó no tomarlas en cuenta.

Sólo una persona logró que se revisara su caso. Arnulfo Pacheco, quien es parapléjico, pudo “demostrar” con su presencia que ante su condición física –necesita silla de ruedas para trasladarse- no pudo participar activamente con el movimiento por su imposibilidad para caminar y moverse por sí solo. ¡Háganme el favor!

Mientras las víctimas de la represión y el joven muerto siguen esperando justicia.


En seguida una colaboración tomada de La Jornada.




http://www.jornada.unam.mx






Astillero

Julio Hernández López

El juego del ombudsman
Aparentar, mediatizar
Partituras de elite
Oficioso MP Federal



La Comisión Nacional de Derechos Humanos es un juguete caro que sirve para aparentar que en México se atienden y corrigen los excesos cometidos desde el poder contra los ciudadanos. Su actual presidente, José Luis Soberanes, es un aplicado continuador de las políticas de comercialización del conocimiento jurídico que para fines de escalamiento de la alta burocracia implantó Jorge Carpizo, el corruptor fundacional del concepto del ombudsman. Creadas desde el poder, designados sus titulares mediante arreglos facciosos y comprometidas con el funcionamiento "institucional", es decir, con el canje de favores y encubrimientos en puntos clave para que todo siga funcionando en el tono compartido por los beneficiarios de esas partituras de elite, entidades como la CNDH, el IFE y el propio IFAI demuestran que la presunta "autonomía" de ciertas organizaciones "buenas" no ha sido más que una treta bien pagada.

El caso de Zongolica ha mostrado con crudeza a un Soberanes que en otros temas había podido manejar con más eficacia los disfraces. Pero nunca ha sido dicho funcionario un verdadero defensor del pueblo que hubiera retado o confrontado al poder para que se reconociera una verdad o se estableciera la justicia. Soberanes es parte de la clase política que ha sobrevivido a la era del control priísta y ha pasado a la etapa de vaivenes a veces inexplicables o aberrantes del aprendizaje panista. A finales del sexenio de Vicente Fox mantuvo un forcejeo verbal motivado más por los modos y desdenes del ex gobernador de Guanajuato que por diferencias de fondo o conflictos trascendentes. De cualquier forma, ese distanciamiento del foxismo le permitió a Soberanes asumir posturas declarativas de presunto desafío del poder, rozando incluso, en varias ocasiones, los terrenos de la opinión política más que los propios de su encargo.

Pero con el débil aparato calderonista el hombre de política apellidado Soberanes ha encontrado comodidad y expectativas, de tal manera que la CNDH se ha acomedido a cumplir tareas de desactivación de conflictos como el de Zongolica. El planteamiento es sencillo: el secretario de la Defensa Nacional ha sostenido públicamente que no se protegerá ningún abuso cometido por hombres de verde y que, en ese tenor, se respetará y se exigirá respeto a dictámenes o señalamientos de instituciones que establezcan inocencias o culpabilidades. ¡Y resulta que el buen amigo Soberanes se ha aprontado, convirtiéndose en un oficioso agente del Ministerio Público Federal, a expedir exoneraciones pasando por encima de indagaciones locales que eran favorables al dicho de los exigentes de justicia y sin siquiera llamar a comparecer a los soldados presuntamente culpables de una violación fatal! Tal como un agente del Ministerio Público, que tiene el monopolio de la acción penal, el agente Soberanes consideró que no había sustento en las denuncias recibidas y determinó a su personal criterio que no tenía sentido seguir con el asunto: carpetazo por órdenes del jefe federal. De tal manera que, establecida una verdad por la instancia supuestamente defensora de los derechos humanos, y convalidada por los comerciantes de la opinión pública, el caso de Zongolica quedaría como una anécdota más.

Pero diputadas federales de distintos partidos, que han conocido el expediente amplio de la muerte de Ernestina, han insistido en que en San Lázaro se atienda a fondo el punto y luego, teniendo frente a ellas al titular de la CNDH, le han puesto lo que La Jornada describió en primera plana como una "tunda". Y el gobierno de Veracruz, encabezado por un personaje escurridizo y tramposo, ha sostenido sin duda la tesis de la violación que la procuraduría estatal de justicia había establecido. Además de que la fuerza de los hechos, y las evidencias documentales y testimoniales disponibles, están llevando a más segmentos periodísticos a atender cuando menos con cierto equilibrio la información derivada de este caso.

En ese contexto, la CNDH y su titular quedan en evidencia y demuestran que allí, como en el IFE, son necesarios relevos, pues la función presuntamente ejercida está ya no sólo bajo sospecha sino bajo repudio popular. Una institución que debe proteger los derechos humanos no seguirá adelante con eficacia si no hay confianza en ella. Tal vez sea tiempo de que José Luis Soberanes vaya pensando en el nuevo cargo que el agradecimiento felipista-militar tenga a bien darle.

Mientras tanto, el michoacano al que gustaba usar como canción de campaña el corrido del hijo desobediente fue a Guanajuato a hablar contra el paternalismo político y, al mismo tiempo, rendirle honores al progenitor del gran fraude del 2 de julio de 2006 que, por tanto, es padrastro o tutor de los resultados institucionales de aquellas violaciones. Menciones y agradecimiento público prodigó al jefe Chente el hijo pródigo, cuadro pictórico en el que se mezclan el reconocimiento del papel dirigente que aún tendría el ex presidente en la política interior y, sobre todo, la aceptación y el aval a las nuevas andanzas de quijotería a la inversa que está practicando a escala internacional el caballero armado de nombre Vicente, quien ha prometido ir a lomos de caballo a Venezuela para defender a aquel pueblo de las tiranías y maldades del presidente de esa república sudamericana con quien pretende (¿o pretendía?) reanudar buenas relaciones el jovenzuelo de espejuelos que sin embargo prefiere acogerse a los trazos y decisiones que toma el adulto mayor que oficialmente ya no gobierna pero sí es sapiente guía reconocible. Por cierto, linda declaración del chivo Fox en cristalería: "Soy un ciudadano privado (¿de la razón?, pregunta algún astillero siquiátrico) y el presidente Calderón es una institución aparte. No veo por qué razón mi labor a favor de la democracia en países como Venezuela pueda afectar al gobierno de México". ¡Ya está: si Hugo Chávez se queja de algo, la CNDH podría expedir un certificado de gastritis intelectual a nombre de Chente, y colorín colorado! ¡Feliz fin de semana!

Fax: 5605-2099 * juliohdz@jornada.com.mx * www.juliohernandez.com.mx

jueves, abril 26, 2007

Infamia de las "instituciones"






Tomados de La Jornada, Rocha, Hernández y Helguera y El Universal, Naranjo y Helioflores.


El proceso electoral de julio de 2006 marcó en México el descaro de las “instituciones” para aplicar la ley a modo, a su conveniencia, a la de los poderes que realmente gobiernan el país. El poder del dinero –los empresarios y medios de comunicación- el de los partidos políticos y el de los jueces que venden caros su veredictos, que irremediablemente contribuyen al deterioro de una democracia incipiente, atrasada, urgida de oxígeno.

La resolución de los magistrados del Trife –varios de los mismos que avalaron el fraude electoral, pese a reconocer la violación de las leyes- rechazaron la petición de acceder a las boletas electorales afirmando que de hacerlo así se vulneraría el precepto de voto libre y secreto. Una mentira más pues la boletas electorales no cuentan con nombre ni manera de identificar a quien corresponde, por lo que no se vulnera de ninguna manera el secreto del voto.

Al decidir que el acceso a las boletas es restringido –a jueces del Trife y al propio IFE, nada más- se abre un abismo en el camino de la transparencia. ¿Cómo creer en las “instituciones” si ellas mismas se encargan de engendrar los acuerdos en lo oscurito, sin claridad para nadie? ¿A que le temen las “instituciones”? ¿A comprobar –como ya quedó claro- que no ganó el pelele y que robaron la elección a millones de mexicanos?


Primero el Trife desechó la posibilidad de tener acceso a las boletas electorales, que en los hechos es inatacable, es decir, en el país no hay más que hacer. Pero al mismo tiempo le corrige al IFE el dictamen y lo obliga a presentar nuevamente los argumentos para rechazar el que ciudadanos puedan ver las boletas. No se queda ahí, el Trife le dice de qué manera contestar a los reporteros del programa de Carmen Aristegui y de la revista Proceso para que todo quede dentro de la “ley”. Sólo que los jueces no pueden “ayudar” a ninguna de las partes en el litigio, pues de esta manera se vulneraría la imparcialidad en la impartición de justicia. Eso ni más ni menos es lo que ha venido haciendo el Trife y la Suprema Corte.

El asunto no termina aquí, ambos reporteros recurrirán a instancias internacionales con las que México tienen firmados acuerdos, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para solicitar su intervención ante la flagrante violación del Estado de derecho por parte de las “instituciones” mexicanas.

Otro dato que muestra el “avance en la transparencia” de los actores públicos del país es que ambos reporteros han tenido que recurrir a los servicios de abogados –hasta cuatro en un caso- para que los asesoren en la petición de sus demandas y en la presentación de amparos contra resoluciones del IFE. Es decir algo que según la publicidad gubernamental algo que debería ser fácil, de libre acceso a cualquiera, se vuelve un vía crucis, que implica gastos considerables. ¿Esa es la transparencia que pregonan? Primero gastas cantidades importantes para obligar a las “instituciones” a cumplir con la ley y al final estas “instituciones” dicen que no y con la “ley en la mano”. ¡Es una burla! ¡Pero ese es el México real, el de hoy!


En seguida una colaboración tomada de La Jornada.


http://www.jornada.unam.mx



Cuando se mueve el avispero

Octavio Rodríguez Araujo


Las avispas no necesariamente son agresivas, pero cuando se las molesta tienden a picar con su aguijón. Uno debe tener cuidado al tratar de acabar con un panal de avispas y saber hacerlo. De otro modo, se revierte, y el "exterminador" puede resultar seriamente dañado.

Cuando Felipe Calderón resolvió combatir el narcotráfico algo falló en el método y en la prevención de las consecuencias. Ya perdí la cuenta de las muertes provocadas por el narcotráfico, principalmente de policías y de otras personas relacionadas con la administración de justicia en nuestro país. Todas o casi todas tienen la apariencia de haberse realizado por venganza, algunas bajo la forma de ajusticiamientos más que como advertencia. Muy lamentable.

El crimen se ha extendido, sobre todo en aquellos estados donde más han actuado las fuerzas militares encargadas por el Ejecutivo para combatir a los narcotraficantes. De golpe varias ciudades del país se volvieron la Medellín de la película La virgen de los sicarios (2000), dirigida por Barbet Schroeder y basada en una novela y un guión de Fernando Vallejo. ¿Cuántos años, por cierto, lleva la guerra contra el narcotráfico en Colombia y qué resultados positivos se han obtenido?

No digo, ni pretendo sugerirlo, que el crimen organizado deba ser permitido ni tolerado en lugar de combatirlo. Por salud social debe ser perseguido, y sus autores, intelectuales o directos, detenidos. Pero la forma en que se está haciendo no parece ser la mejor. Ahora los ciudadanos, y no sólo los miembros de las diversas fuerzas del orden, estamos expuestos a ser victimados, sin tener parte en el asunto. Si andar por las calles es un peligro desde hace 20 años, por el aumento de criminales de poca monta que asaltan, roban y secuestran (algo que casi no ocurría a principios de los 80 del siglo pasado), en el presente la inseguridad se ha vuelto una amenaza de tal magnitud que terminará por encerrarnos en nuestras casas (nunca ciento por ciento seguras). Salir a la calle, sin metáforas de especie alguna, es un riesgo, en algunas ciudades más que en otras.

Pero ese riesgo es mayor porque Calderón movió el avispero sin medir las consecuencias y sin haber creado antes mecanismos de defensa para quienes nada tenemos que ver con el narcotráfico ni con el gobierno. Se trata de una medida necesaria y no sólo mediática, pero no se siguió una estrategia adecuada, si juzgamos los resultados. Para decirlo de manera simplista, lo que ahora parece es que se están dando palos de ciego a una piñata que todos sabemos que ahí está, pero no que su contenido, que en este caso no es de dulces ni frutas, nos puede caer encima, como ya está ocurriendo con graves secuelas.

Lo que veo, como ciudadano y lector de periódicos es que esta guerra no se está ganando. La sociedad, y en ésta incluyo a policías que no están directamente involucrados con esta guerra, lleva más muertos que los peligrosos hampones perseguidos por el gobierno, y normalmente en una guerra el que tiene más muertos es el que pierde.

La guerra de Eliot Ness contra Al Capone se inició aproximadamente en 1927 y el mafioso fue condenado en 1931, pero antes Ness dedicó sus esfuerzos a depurar la corrupción entre la policía hasta quedarse con sólo nueve elementos de su absoluta confianza. Con esto atacó a Capone por dos lados: evasión de impuestos y contrabando de licor en la "era de la prohibición". Con Capone sentenciado no terminó la lucha contra las mafias en Estados Unidos, pero con el fin de la prohibición en 1935 los mafiosos tuvieron que dedicarse a otros negocios y ahí siguen, no los mismos, pero sí sus socios más jóvenes, o sus hijos u otros que surgieron después. Las mafias y el narcotráfico no han desaparecido en el país más poderoso de este planeta. ¿En el nuestro sí desaparecerán? Perdóneseme mi pesimismo, pero mi respuesta es contundentemente negativa.

En el libro de James Mills (The Underground Empire. Where Crime and Governments Embrace/El imperio subterráneo. Donde crimen y gobiernos se abrazan), publicado en 1987, se involucra a varios políticos mexicanos en activo como cómplices o relacionados con el narcotráfico. Ahí se mencionan varios personajes muy importantes de gobiernos de aquella época. ¿Por qué no pensar que ahora ocurre algo semejante? ¿Se ha hecho una investigación a fondo de los posibles funcionarios públicos coludidos con los capos del narcotráfico?

Hay quienes sostienen que la mejor manera de acabar con el tráfico ilegal de drogas es legalizándolas. Yo estoy de acuerdo con esa hipótesis. Es cierto que con una medida semejante no se terminará con el consumo de drogas, como no se ha terminado con el de alcohol legalizando su producción, venta y consumo, pero lo que sí es un hecho es que, con la excepción de bebidas adulteradas metidas de contrabando en el comercio legal, se acabaron las mafias que vivían del tráfico ilegal de bebidas alcohólicas. Ahora son otras o cambiaron de giro, pero siempre existirán. ¿Quiénes son los únicos beneficiarios de que las drogas sean ilegales? Los que comercian con ellas y los que los cubren y protegen desde las instancias que debieran combatirlos, ni siquiera los consumidores que con frecuencia reciben gato por liebre (productos adulterados) y mueren en consecuencia.




La siguiente es una nota tomada de la revista Proceso.



http://www.proceso.com.mx



Niega el TEPJF a Proceso acceder a las boletas electorales


jorge carrasco y daniel lizárraga

México, D.F., 25 de abril (apro).- El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) rechazó la petición del semanario Proceso para acceder a las boletas de la elección presidencial del 2006, con lo que cerró en definitiva la contienda en la que el propio órgano declaró ganador a Felipe Calderón Hinojosa.

El tribunal negó así a cualquier ciudadano, que en su momento no haya sido autoridad electoral, la posibilidad de acceder a los votos.

Con esa decisión, una vez que el IFE emita una nueva resolución, según lo establecido por el propio Tribunal, las boletas utilizadas en la elección del año pasado podrán ser destruidas.

El principal argumento esgrimido por el Tribunal fue que si bien la petición de la revista era un asunto que tenía que considerarse en relación con la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información, la legislación electoral establece límites para el acceso a la papelería utilizada en los comicios.

Señaló que el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe) establece la inviolabilidad de los paquetes, las personas que pueden manejarlos y la forma de difundir su contenido antes de su destrucción.

La Sala Superior del TEPJF expuso, no obstante, las graves irregularidades en que incurrió el Instituto Federal Electoral (IFE) al ignorar el contenido de la Ley Federal de Transparencia y argumentar infundadas causas de seguridad nacional para rechazar la petición de Proceso.

Por unanimidad, los siete magistrados electorales cuestionaron que el IFE haya desestimado los principios de transparencia vigentes en México y a los que se ha comprometido el país en diferentes instrumentos internacionales.

Como muestra de las deficiencias del Consejo para la Transparencia del IFE, los magistrados concluyeron que las boletas sí son documentos públicos –contrario a lo señalado por el Instituto--, pero éstas no pueden ser manejadas por los ciudadanos una vez concluido el proceso electoral.

En palabras del magistrado Pedro Esteban Penagos, quienes pudieran acceder a las boletas sólo encontrarían “papeles inservibles”, cuya utilidad, en su momento, quedó plasmada en las sesiones de cómputo posteriores al 2 de julio.

La mala fundamentación y motivación para impedir el acceso a los votos por parte del IFE provocó que algunos de los magistrados lanzaran frases irónicas contra ese Instituto. Por ejemplo, Salvador Olimpo Nava, uno de los creadores de la actual Ley de Transparencia, dijo que su intelecto no alcanzaba a comprender los razonamientos de la Comisión de Transparencia al argumentar “razones de Estado” para negar el acceso a las boletas.

El presidente de la Sala, Flavio Galvan, incluso acusó al IFE de haber lanzado juicios “genéricos, abstractos y dogmáticos” respecto a la supuesta seguridad nacional, ya que este concepto tiene un uso diferente y mucho más amplio al que pretendieron constreñirlo en el Instituto en el caso de las boletas electorales.

El magistrado Manuel González Oropeza propuso una sanción al Instituto, que quedó en una amonestación, por la manera en que trató el recurso de revisión presentado por la periodista Delia Angélica Ortiz, ya que primero se negó a recibirle la impugnación y luego, en exceso de sus atribuciones, declaró improcedente el juicio para la protección de los derechos político electorales, asunto que sólo compete al TEPJF.

El Tribunal acumuló en un solo expediente las quejas de Proceso y de la periodista, porque en ambos casos se trataba de peticiones de acceso a la información relacionada con el impugnado proceso electoral del año pasado. La petición de Ortiz se refería a las candidaturas independientes.

Con esos argumentos, los magistrados revocaron las resoluciones tomadas por el IFE en los dos casos, pues consideraron que la Ley de Transparencia y el Cofipe deben interpretarse “de manera armónica y complementaria”.

Al final, sin embargo, establecieron que el Cofipe dispone la destrucción de las boletas electorales una vez concluido el proceso electoral, por lo que “es evidente que jurídicamente tales documentos no tienen la calidad de información disponible”.

Más aún, decidieron que “la protección de inviolabilidad de las boletas electorales involucra valores que fundamentan el sistema democrático electoral, y por ello, es indudable que se erige como una causa de indisponibilidad… el acceso físico a los documentos señalados”.

Según los magistrados, esa indisponibilidad no puede considerarse como una limitación al derecho de acceso a la información que contienen las boletas, puesto que ésta ya fue publicitada cuando se dieron a conocer los resultados electorales.

miércoles, abril 25, 2007

Triunfo sobre el oscurantismo panista y del alto clero católico







Tomados de La Jornada, Rocha, Hernández, El Fisgón y Helguera y El Universal, Naranjo y Helioflores.

Ante la incapacidad para aglutinar seguidores –pese a la gigantesca campaña publicitaria en radio y televisión- en contra de la ley que despenaliza el aborto en el Distrito Federal, la Iglesia católica y la extrema derecha que dirige el Partido Acción Nacional hacen pataletas y anuncian que la lucha no terminará allí. Es claro que un tema tan polémico no puede darse por concluido, más aún cuando el mismo será tomado a nivel nacional por el Congreso de la Unión.

Sin embargo, la alta jerarquía católica al igual que el PAN vuelven al doble discurso. La Iglesia católica se ha opuesto tajantemente a cualquier método anticonceptivo y su principales blancos han sido el uso del condón y la pastilla de emergencia, utilizada en los siguientes tres días a una relación sexual en la que no se usó ningún anticonceptivo. La dirigencia panista ha sido proclive a defender estas posturas que van en contra de lo que se legisla a nivel mundial y de lo que recomiendan tanto el sentido común, como la experiencia internacional.

La posición de la jerarquía católica no ha quedado ahí se ha opuesto una y otra vez a la educación sexual –en los últimos seis años se ha retrocedido en esta materia, por la acción del infame y traidor Vicente Fox Quesada-, la información clara y oportuna a adolescentes. Ahora que la ley fue aprobada, los panistas pretenden engañar –como siempre- con los discursos de que no se necesita llegar a “extremos” se pueden hacer campañas informativas y utilizar métodos preventivos, aseguran. Claro que todo es una estrategia para desinformar y retrazar los verdaderos cambios que necesita el país en todos los ámbitos.

Pues mientras por un lado dicen defender la vida, por otro evitan hacer críticas a sus amigos, los ricos empresarios, sobre los problemas de salud que crean al fomentar el consumo de cigarros, bebidas embriagantes en exceso, comida chatarra –como la de Sabritas, Bimbo, McDonalds, Cocacola, Pesicola, etc.- que a la larga traerán a los consumidores una muerte lenta y dolorosa con enfermedades como obesidad, diabetes e hipertensión. El PAN por su lado propone retirar la postura constitucional de neutralidad de México en conflictos bélicos internacionales, ahí no hay tal defensa de la vida, pues las guerras son muerte. Ese tipo de contradicciones son constantes tanto en el alto clero católico mexicano como en la dirigencia panista.

El debate acaparó semanas y los medios de comunicación –cercanos y cómplices del poder- aprovecharon la ocasión para correr una cortina de humo sobre temas fundamentales en la vida de los mexicanos. Uno de ellos es la violación de la indígena Ernestina Ascensio Rosario, otro es el precio de la tortilla, que sigue cara, la reforma política del Estado, la anulación de la neutralidad mexicana en conflictos internacionales, el fracaso total -¡diario hay ajusticiamiento de bandas criminales!- de la lucha contra el crimen organizado. Esos son algunos de los temas que vienen, de los pendientes, de aquello que también es fundamental para todos.


La siguiente es una nota tomada de Proceso.









El cerco a los Bribiesca



jesusa cervantes



México, D.F., 24 de abril (apro).- La tercera comisión especial que indaga los presuntos beneficios gubernamentales en favor de los hermanos Bribiesca, anunció hoy dos nuevas líneas de investigación: las subastas del Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) y del Instituto para la Protección del Ahorro Bancario (IPAB) de bienes que originalmente fueron de Serfín pero que hoy vende el segundo hijo de Marta Sahagún.

Elías Cárdenas, presidente de la nueva comisión e integrante del partido Convergencia, presentó hoy junto con Gerardo Yamomoto, dirigente del Movimiento Jurídico Nacional El Barzón, documentos que acreditan cómo algunas casas que perdieron habitantes de Michoacán fueron a parar a manos del Fobaproa, luego al IPAB, y ahora las vende Jorge Alberto Bribiesca Sahagún.

El 12 de marzo de 2006 Proceso documentó este caso, pero la segunda comisión investigadora no tuvo tiempo de ahondar en las indagaciones. El semanario dio cuenta de cómo Jorge Alberto Bribiesca Sahagún entendió rápido el negocio inmobiliario de su hermano Manuel. Copió fielmente su esquema y hoy se beneficia de propiedades que tenía el IPAB en sus manos para venderlas a precios exorbitantes; esto durante el sexenio en que su madre llegó a Los Pinos como esposa del entonces presidente Vicente Fox.

Los nuevos documentos del registro de la propiedad de Michoacán, que dio a conocer Proceso y que hoy nuevamente difundió Gerardo Yamamoto, revelan que Jorge Alberto y su esposa, Ana Cecilia García Espinosa, iniciaron no sólo una vida marital sino también empresarial.

De acuerdo con la escritura pública número 25,367, volumen CMLXXIII, Ana Cecilia y su socio, Hernán Pedrero Sierra, le “donaron”, a Jorge Alberto Bribiesca sus acciones, haciéndolo partícipe de la empresa constructora “Urvica, S.A de C.V, ubicada en Zamora, Michoacán, la tierra de Marta Sahagún de Fox.

Ana Cecilia y Jorge Alberto se casaron en noviembre de 2002 y dos años después, el 13 de abril de 2004, ésta decidió poner en manos del joven empresario las acciones de su constructora Urvica.

Entrevistado por la revista Actual, el hijo de Marta Sahagún confesó que su esposa es muy buena para los negocios, por lo que pronóstico: “algo podremos hacer en conjunto”; y lo lograron.

Una vez que tuvo la empresa Urvica en sus manos, Jorge Alberto empezó los trámites y hoy vende 200 casas del fraccionamiento Manantiales de Curutarán en el municipio de Jacona, Michoacán, el cual era originalmente propiedad de la empresa Constructora e Inmobiliaria Camécuaro, la cual, al caer en cartera vencida, lo perdió todo, por lo que banca Serfin se quedó con los inmuebles.

Lo curioso hoy es que ese fraccionamiento, que en 1995 fue a dar primero al banco, luego al Fobaproa y después al IPAB, en estos momentos es vendido por la nueva empresa del segundo hijo de Marta Sahagun, Urvica.

Lo que hasta el momento se desconoce es qué empresa adquirió del IPAB las casas para que luego Urvica las pudiera vender. Los miembros de El Barzón en Michoacán, encabezados por Gerardo Yamamoto, sugieren que la intermediaria fue otra empresa de la familia de la esposa de Jorge Alberto, Servicios Urvica, creada justamente un mes después de que se casaron los jóvenes michoacanos.

De acuerdo con la escritura pública número 23,636, volumen CM, Hernán Pedrero Sierra y Jorge Alejandro García Tortoriello --padre de Ana Cecilia--, crearon el 30 de diciembre de 2002 la empresa “Servicios Urvica”, la cual tiene entre sus objetivos, “compra-venta, demolición, reacondicionamiento, construcción, arrendamiento y administración de toda clase de inmuebles, y todos los actos y contratos civiles y mercantiles encaminados a la realización de su objeto social”.

Justamente por desconocerse quién fue el primer adquiriente de los bienes del IPAB es que la tercera comisión especial que encabeza el diputado Elías Cárdenas demandará al Instituto una descripción total de las subastas que realizó durante el sexenio pasado.

Lo que el IPAB no alcanzó a subastar, ya que por ley tenía hasta el año 2004 para hacerlo, debió traspasarlo al SAE. Ahora también solicitará información sobre quiénes adquirieron por lo menos 121 bienes inmuebles, a qué precio y bajo qué condiciones pero sobre todo cuáles fueron los criterios para valuarlos.

Hasta el momento la tercera comisión especial sólo cuenta con “presunciones” de que dichas subastas del SAE se vieron beneficiados los hijos de Marta Sahagún.

El diputado de Convergencia anunció también que impulsarán la aprobación en Cámara de Diputados de la reforma al artículo 162 Bis de la Ley del IPAB, a través de la cual se le dará preferencia a los propietarios originales de las casas para que sean ellos quienes las puedan adquirir y no gente como los hermanos Birbiesca o grandes grupos empresariales.

La reforma fue aprobada durante la legislatura pasada en la Cámara de Diputados, avalada en el Senado de la República pero como tuvo pequeñas modificaciones debe ser nuevamente aprobada por los diputados.

El diputado de Convergencia denunció que la minuta se encuentra “congelada” en la Comisión de Hacienda, por lo que anunció que buscarán llevarla de nuevo al pleno.

martes, abril 24, 2007

La doble moral del alto clero y del PAN






Tomados de La Jornada, Rocha, Hernández y El Fisgón y El Universal, Naranjo y Helioflores.

La seriedad con que la Iglesia católica toma el asunto de los dogmas de fe queda demostrada en las rectificaciones y ratificaciones que ha hecho en los últimos años de papado anterior y en el presente.

Hace unos días el alto clero del Vaticano decidió –como siempre lo ha hecho, qué es bueno y qué es malo- que el limbo ya no existía y que desde ahora los niños que no fueran bautizados irían al cielo por misericordia divina, pues Dios es misericordioso. Esta norma funcionó durante siglos como una forma para presionar a los padres para que bautizaran a sus hijos, ya que de no hacerlo éstos nunca podrían llegar al cielo.

Aunque el limbo nunca tuvo fundamento histórico ni bíblico los que mandan en el Vaticano infligieron sufrimiento innecesario a los padres de aquellos fallecidos sin bautizar. Cientos de años después dicen que ya no importa.

Se trata entonces de la utilización del miedo como forma de presión para someter a los creyentes a aceptar la interpretación de los evangelios por parte de la jerarquía católica.

También durante siglos el Vaticano amedrentó a los católicos con aquello de que sus almas arderían en el infierno, un lugar destinado para los pecadores, donde Lucifer decide qué tipo de castigos –los peores por supuesto- aplicar a cada uno dependiendo de sus “pecados”.

Resulta que en 1999 el Vaticano rectificó esta definición y aseguró que el infierno no era más un lugar, sino una situación en la que se encuentra el alma.

Asimismo decidió que el físico italiano Galileo Galilei, -aquel que afirmó que la tierra no era el centro del universo, retomando los dichos de Copérnico lo que sabemos que es cierto- excomulgado y amenazado en su momento con la pena de muerte si no rectificaba –cosa que hizo-, fue rehabilitado por Juan Pablo II en 1992, más de 300 años después de su muerte.

Otra más. En 1994 Juan Pablo II pidió perdón por varios hechos de la historia negra de la Iglesia católica. Primero por el actuar de la Santa Inquisición, que asesinaba –en nombre de Dios- a quien pensara diferente a lo que dictaba el Vaticano, acusándolos de tener pacto con el diablo. Los miserables que caían en sus manos no tenían escapatoria, su muerte era cuestión de tiempo. Mediante la tortura los hacía confesar sus “crímenes” contra la Iglesia y luego eran asesinados en eventos públicos, si no es que morían a causa de la tortura. En cualquiera de los casos sus almas eran dictaminadas como rescatadas del mal. De esa manera justificaban los miles de muertes achacadas a los dictados de Dios. Tuvieron que pasar cientos de años para que el Vaticano reconociera, lo que era evidente para todos: el salvajismo de ese tribunal y la complicidad de la alta jerarquía católica en esos asesinatos.

Asimismo, Juan Pablo II viajó a Israel para intentar cerrar las heridas causadas por el actuar del Vaticano durante la Segunda Guerra Mundial, donde millones de judíos murieron por la inacción o la descarada colaboración con la Alemania nazi en el exterminio de estas personas.

Esos que ahora dicen “defender la vida” son quienes a lo largo de la historia han actuado y lo siguen haciendo en contra del bien social. Cambian de parecer a su conveniencia, se acomodan a los dictados del poder y del dinero. En los casos anteriores –documentado todo en la historia- se trataba de personas de carne y hueso. No de células y tejidos. Sin embargo eso no fue impedimento para que el Vaticano contara con licencia para matar.

Queda pues expuesta la doble cara del Vaticano y de la Iglesia católica del mundo. Por una lado dicen defender la vida y por otro son los principales hostigadores y de ellos parten las principales amenazas de muerte en contra de quienes no piensan como ellos. Todo en contradicción con los dictados de los evangelios y la misericordia de Dios.

A unas horas de que se apruebe la despenalización del aborto en el Distrito Federal, el vocero del cardenal Norberto Rivera Carrera –quien está acusado en Estados Unidos de proteger a un sacerdote pederasta-, Hugo Valdemar se autonombró perseguido político.

"El primer perseguido de Estado" del gobierno local, porque -según refirió- "van tres semanas de persecución contra mi persona. La primera fueron los abortistas, que acudieron a interponer demandas y se pusieron a vociferar contra mí; la semana pasada fueron los perredistas encabezadas por el legislador Víctor Hugo Círigo" que pretende poner en su contra "todo el poder del Estado", y la tercera, agregó, "por las acusaciones que han ido a hacer a Gobernación, además del acoso".

En el colmo del cinismo el sacerdote Valdemar, quien ha lanzado por años amenazas en contra de quienes critican el actuar faccioso de la Iglesia católica mexicana, ahora se dice perseguido político. Para aclarar: un perseguido político no tiene acceso a los medios de comunicación masivos como radio y televisión en horario estelar y al momento que lo solicite. Tampoco viaja en autos último modelo, ni come en los mejores restaurantes del país. Y mucho menos es amigo de la gente más rica y poderosa de la nación. Así que de nuevo el sacerdote Valdemar cae en la mentira. Utiliza en chantaje para ganar adeptos. ¿Eso es lo que dicen los evangelios? O más adelante el Vaticano los abolirá también, ya que se oponen a sus intereses.

En febrero de 2005 el mismo Valdemar –amigo de la “pareja presidencial” de rateros: Marta y Vicente, quienes por cierto viven en el pecado pues no están casados por la iglesia- tuvo que dar la cara para fijar la posición del alto clero mexicano sobre la nulidad del matrimonio religioso concedido a la déspota Sahagún . En un comunicado de prensa leído por el autoperseguido políticoValdemar señaló que el tribunal eclesiástico declaró nulo el matrimonio entre la señora Marta Sahagún y el señor Bibriesca, es decir que nunca existió.

"Se hizo una declaración de "nulidad" que quiere decir que nunca hubo matrimonio, entre la señora Marta Sahagún y el señor Bibriesca", señaló Hugo Valdemar.

El sacerdote Hugo Valdemar

El vocero de la Arquidiócesis dijo que un tribunal eclesiástico resolvió, después de realizar su juicio canónico, que nunca se dieron las condiciones necesarias para que la unión de la señora Marta Sahagún y el señor Manuel Bibriesca fuera consolidada validamente como un matrimonio. De nada valen los tres hijos que procrearon, el matrimonio no existió. ¡Háganme el favor! ¡No más mentiras y doble moral! ¿No que respeto al Estado de derecho?


En seguida dos artículos tomados de La Jornada.




http://www.jornada.unam.mx






¿Y por qué no desaparece el infierno también? /I

José María Pérez Gay

"¡Ay, Pepe, estás en el limbo", decía mi madre decepcionada y de mal humor, cuando me veía ausente o distraído. Yo, que había cumplido entonces 10 o 12 años de edad, me imaginaba el limbo como un lugar -sin tiempo y sin espacio- donde habitaban los individuos torpes o los imbéciles fugaces. En su riguroso sentido latino, limbo significa el fin o extremo de alguna cosa, en especial se llama limbo a la orla o parte última de un vestido. Mi necesaria educación jesuita me explicó más tarde su auténtico significado. En el segundo año de secundaria, el "hermano" -por ese entonces no se había ordenado sacerdote- Juan Lafarga nos dijo que el limbo era el nombre de un reino celestial donde estaban depositadas las almas de los Santos Padres y Patriarcas, esperando la redención del género humano. Y también se llamaba limbo -nos dijo con un tono de misterio inescrutable- al lugar donde van las almas de los que mueren antes de tener uso de razón, sin haber recibido el sacramento del bautismo. "Más lejos del infierno y más vecino al Cielo está el limbo de los padres, llamado por excelencia "seno de Abraham" -recuerdo haber leído en alguno de los textos canónicos, que nunca entendí.

La Comisión Teológica Internacional, un departamento de la Congregación para la Doctrina de la Fe, ha publicado el viernes 20 de abril un documento -con la autorización del papa Benedicto XVI- La esperanza de salvación para los niños que mueren sin haber sido bautizados, resultado de las investigaciones y conclusiones sobre la "Cuestión del limbo". Hace tres años fue llevada ante la comisión la idea del limbo para ser sometida a un examen teológico exhaustivo que determinara la naturaleza, el remedio y el destino de una floración teológica parasitaria que amenazaba con destruir la idea de salvación en el cristianismo.

El Vaticano ha decidido abolir el concepto de limbo "por reflejar una visión excesivamente restrictiva de la salvación". La comisión subrayó que consideraba el tema una cuestión pastoral urgente "por la cantidad de niños nacidos de padres católicos no practicantes y porque muchos otros son víctimas del aborto antes de nacer" (La Jornada sábado 21 de abril). Esta decisión parece un disparate histórico. En efecto, el limbo surge el año de 418 en el Concilio de Cartago. Es decir, 600 años después de Cristo y era una verdad aceptada por todo el mundo cristiano de que el limbo se fundamentaba en la idea del pecado original, cuya primera aparición por escrito se encuentra en la Epístola de Pablo a los romanos, en el año 57 dC, un pasaje difícil y oscuro, donde Pablo establece un paralelismo entre Adán y Cristo.

Mientras el pecado y la muerte entraron en el mundo por la caída de Adán -"la muerte gobernó desde Adán hasta Moisés", escribe Pablo, "más todavía: reinó sobre aquellos que aún no habían pecado"- la gracia y la vida eterna llegaron por la resurrección de Cristo". "¿Oh, muerte dónde está tu aguijón? ¿Oh, sepulcro dónde está tu victoria?". Pablo, un viajero incansable, escribió en Corintio esta carta a Roma, capital de un imperio que se extendía desde Inglaterra hasta los países árabes. El versículo más citado de Pablo, donde según los comentaristas fundamenta la idea del pecado orininal es el siguiente: "Por la desobediencia de un solo hombre, Adán, todos se convirtieron en pecadores". Un salmista, muchos siglos antes, escribió: "He aquí, en maldad he sido formado, Y en pecado me concibió mi madre".

Si alguien le hubiera avisado a tiempo que la idea del limbo iba a ser abolida, mi profesor Fernando Sodi Pallares -admirable intérprete de Tomás de Aquino, y profesor de filosofía en la Uia el año de 1962- habría podido ahorrarse muchos dolores de cabeza antes de que intentara explicarnos la idea del limbo. Don Fernando planteaba dos dilemas: el primero, ¿adónde va el alma de un niño inocente si la muerte lo sorprende antes de ser bautizado? Tomás de Aquino afirmaba que esos niños "son por naturaleza beatos". Desterrar al bebé al infierno era una medida no sólo implacable, sino horripilante. Al mismo tiempo no podían permitir su entrada al Cielo, porque desmentía la idea cristiana de la salvación a través del renacimiento por el agua (bautismo). La Iglesia creó entonces un nuevo reino celestial llamado limbus infantum, el limbo de los niños, que se localizaba -desde una perspectiva cosmográfica- al "sur del Cielo", vale decir: debajo. Todos los bebés sin bautismo y todos los fetos muertos desde el principio de los tiempos estaban todavía en el limbo, esperando el juicio final, momento en el que resucitarían con sus cuerpos, limpios de pecado original, y una corte de ángeles los acompañaría al Cielo. El limbus infantum, limbo de los niños, se ha convertido ahora con toda seguridad en una ciudad fantasma, sin memoria y desploblada.

Don Fernando Sodi Pallares enfrentaba el segundo dilema. Abraham y los patriarcas del Antiguo Testamento, hombres santos pero desdichados, habían muerto antes de que Cristo redimiera a la humanidad. ¿Qué hacer entonces con tanto pagano honorable como Platón y Aristóteles? Sodi era un conocedor sagaz de Aristóteles. ¿Qué hacer con su alma? ¿Dónde se habrían escondido las almas virtuosas durante todos los siglos de los siglos? Si recuerdo bien a Tomás de Aquino, y mi memoria no traiciona a don Fernando Sodi Pallares, la Iglesia creó un limbo anexo: limbus patrum, el limbo de los padres, el lugar donde reposaban los santos del Antiguo Testamento y los paganos de buen corazón. El limbus patrum está desde hace tiempo vacío, porque Cristo abrió las puertas del cielo a las almas mortales (?). Abraham, Platón, Aristóteles y las demás legiones de hombres inteligentes y buenos han ascendido -pasando a través de un techo de cristal- al cielo.

Algunos teólogos católicos se han negado a desmantelar el limbo de los padres, lo han reservado para las almas de los buenos judíos, los budistas generosos, los millones de santos hindúes o musulmanes de nuestros tiempos -todos ellos buenos pero desdichados por no ser cristianos, condición que les impide entrar en el Cielo. Sólo después del juicio final se abrirán las puertas doradas del Cielo cristiano y pasarán todas las gentes justas de las otras religiones. La idea del limbo ha sido producto de una permanente improvisación y ha sido también muy poco clara. Ningún Papa se atrevió a declarar al limbo un dogma y, antes de su definitiva abolición, se convirtió en uno de los puntos más inestables de la teología cristiana, una suerte de sala de espera. El limbo era, en efecto, un limbo.

A pesar de que nunca ha sido doctrina de la Iglesia católica apostólica y romana, la proposición teológica del limbo se impuso a lo largo de los siglos. En octubre de 1958, el Ministerio del Interior del Vaticano -con el fin de que los recién nacidos que fallecían no fuesen a reposar en el limbo- alertaba a los padres de familia y a los párrocos: "En algunos lugares se ha difundido la práctica de retrasar el bautismo por razones de conveniencia... El Santo Padre, Pío XII, advierte a los fieles que los niños deben ser bautizados tan pronto como sea posible".

Oscar Wilde afirmaba que no valía la pena cometer ningún pecado, salvo que ese pecado fuese el original. En la teología cristiana, el pecado original es la mancha hereditaria que lleva en el alma todo mortal -excepto la Bienaventurada Virgen María- por la desobediencia del primer hombre: Adán. San Agustín ordeñó la idea del pecado original hasta extremos insospechados. La Iglesia se estremece todavía, los teólogos se preocupan y lamentan el ataque implacable de San Agustín, obispo de Hipona, contra los inocentes bebés: "Esos niños desdichados -que fallecen sin ser bautizados- deben enfrentar el juicio de Dios, porque son recipientes de injurias y la ira de Dios está sobre ellos". Los historiadores cuentan que Agustín se ponía frenético en los debates públicos, poseído de una cólera divina, cuando se tocaba el tema: "El bautismo es lo único que puede liberar a estos desgraciados niños del reino de la muerte y del poder del mal. Si nadie los libra de la garra del demonio, ¿debería sorprendernos que padezcan en las llamas del infierno. No puede haber duda en este tema: irán al fuego eterno con el demonio".

En el transcurso de los siglos, los teólogos cristianos han defendido a San Agustín afirmando que no quiso decir lo que dicen que dijo de modo tan apasionado. Según sus defensores, el obispo de Hipona sólo quería asestar un duro golpe a los seguidores de Pelagio, un grupo de herejes que floreció con una fuerza increíble en los siglos IV y V de Cristo, negando la idea del pecado original. Por desgracia, la Iglesia estuvo de acuerdo con Agustín -a menudo con enorme disgusto- durante los cinco siglos que siguieron. "No hay nadie que pueda estimar" -escribe Charles Panati- "el número de bebés no bautizados que fueron al infierno como consecuencia de una teología tan errática". Tomás de Aquino -más demócrata si en la Edad Media tal cosa era posible- sostenía que los niños no bautizados, incapaces de poseer la inteligencia que les permitiese" pecar por sí mismos, sufrían el "dolor por la pérdida" de Dios, pero no "el dolor del sentido" del fuego. El doctor de la Iglesia argumentaba en sentido contrario a la perspectiva ígnea de Agustín.

La idea del limbo no existiría sin la creencia en el pecado original, tal como fue definida por el Concilio de Trento en el siglo XVI, aparece antes en las cartas de San Pablo, y le da cuerpo San Agustín 300 años más tarde. Pablo era quizá ambiguo en este tema, el obispo de Hipona, por otra parte, era estridente, inflexible e inequívoco. Quizá haya sido Alberto el Magno, en el monasterio de Colonia, Alemania, el que acuñó el término "limbo" -aunque, en la época de Alberto, se creía que el limbo era la frontera con el infierno; en alemán limbo se dice Vorhölle, vale decir: la antesala del infierno.

A finales de la década de los 50, en el Instituto Oriente de Puebla me llamaba la atención que los sacerdotes jesuitas, nuestros maestros, nos prohibían leer libros que no tuviesen inscrita la leyenda nihil obstat, "aprobada". He vuelto a recordarlo porque en esos años quise leer un libro: El purgatorio y el limbo, y me lo prohibieron. Ahora que el limbo ha desaparecido, me pregunto: ¿Y por qué no desaparece el infierno también? ¿No es suficiente con nuestro diario exterminio? ¿Alguien puede imaginar en Africa peor castigo que vivir en ese continente? ¿Las llamas del infierno? No, el salario del pecado de los seres humanos no es la muerte, sino Armenia, Auschwitz, Kolyma, Camboya, Guatemala, Perú, Aguas Blancas, Srebenica, Sudán y Sierra Leona.







¿Y por qué no desaparece el infierno también? /II y último

José María Pérez Gay

La historia del limbo es también la del control de la natalidad y de sus enemigos. Pedro de Abelardo (1079-1144) es el filósofo que rompe con la concepción fanática de San Agustín -que imponía a los no bautizados la condena eterna en las llamas del infierno. Abelardo argumentaba de una manera inteligible. En efecto, los niños no bautizados estaban manchados por el pecado de Adán, y en el caso de que la muerte los sorprendiera antes del sacramento, no eran condenados al infierno ni tampoco se les permitía entrar en el mismo Cielo, sino que los niños iban a un suburbio de éste -no se llamaba todavía limbo-, desde el cual no podían ver a Dios, padecían su ausencia, una metáfora muy parecida a la que empleó Juan Pablo II para definir infierno. El castigo de las almas no purificadas era, según Abelardo, sufrir la ausencia de Dios, "la separación de su esplendor". "La oscuridad", como Abelardo llamaba a ese estado corrosivo y neutro.

Abelardo se impuso en los siguientes tres siglos, la benigna "oscuridad", condición natural de los no bautizados, se convirtió en parte del imaginario cristiano y popular. El Elucidarium (La Elucidación) del teólogo Honorio de Autun (1090-1152), escrito en latín y traducido al alemán y al francés, sostuvo durante siglos la benigna "oscuridad" de Abelardo cuando hablaba del limbo.

El limbo es lo que el "Credo" designa como "infiernos" cuando se afirma que "Jesucristo descendió a los infiernos". El Elucidarium explica este artículo al enseñar: "La Escritura llama infiernos, sheol o hades a la morada de los muertos donde bajó Cristo después de muerto, porque los que se encontraban allí estaban privados de la visión de Dios. Tal era, en efecto, a la espera del redentor, el estado de todos los muertos, malos o justos, lo que no quiere decir que su suerte sea idéntica como lo enseña Jesús en la parábola del pobre Lázaro recibido en el 'seno de Abraham'. Son precisamente estas almas santas, que esperaban a su libertador en el seno de Abraham, a las que Jesucristo liberó cuando descendió a los infiernos. Jesús no bajó a los infiernos para liberar allí a los condenados ni para destruir el infierno de la condenación, sino para liberar a los justos que le habían precedido". (nº 633)

Y más adelante (nº 635): "Cristo, por tanto, bajó a la profundidad de la muerte para que los muertos oigan la voz del Hijo de Dios y los que la oigan vivan. Jesús, el Príncipe de la Vida (Hch 3,15), aniquiló mediante la muerte al señor de la muerte, es decir, al diablo, y libertó a cuantos, por temor a la muerte, estaban de por vida sometidos a esclavitud (Hb 2,14-15). En adelante, Cristo resucitado tiene las llaves de la muerte y del hades (Ap 1,18) y al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra y en los abismos (Flp 2,10)".

Los teólogos siguieron debatiendo -con la aprobación expresa de la Iglesia- la validez de la doctrina del limbo. En muchos concilios, en especial el de Trento, en el siglo XVI, habían discutido los temas más delicados del limbo y del pecado original. ¿Todos los seres humanos descienden -chinos, africanos, esquimales, hindúes, zeltales, tarahumaras, mayas- de Adán y Eva? Si los esquimales no se han dado cuenta de sus lazos bíblicos con Adán y su pecado original, ¿será justo echarles encima una culpa que ni siquiera sabían, ni conocían que la habían heredado? En verdad, ¿un recién nacido es todavía responsable del crimen de un lejano antepasado que vivió hace 4 mil años? Las mujeres que deciden en favor de la interrupción de su embarazo, ¿han condenado a un ser vivo a la ausencia de Dios o -cuando el limbo existía- a la oscuridad? ¿Los 70 mil abortos clandestinos anuales en México son legiones de seres destinados a la oscuridad?

En el justo tiempo humano, cuando la gente había comenzado a poner en duda la existencia del limbo, apareció un Papa en el Vaticano que se pronunció apasionado en favor del limbo de los niños. El papa Pío XII (1939-1958) pronunció, en mayo de 1955, una conferencia sobre la necesidad del bautismo ante una convención de parteras italianas. Según la opinión de muchos teólogos, Eugenio Maria Giuseppe Giovanni Pacelli Graziosi, Pío XII, fue demasiado lejos. "En el mundo de los adultos, un acto de amor puede ser suficiente para obtener la gracia santificante -decía Pío XII- y substituir de esa forma la falta de bautismo. Pero este camino no está abierto para los niños que todavía no han nacido o que acaban de nacer. Sin embargo, tampoco hay otro camino" -aseguró el pontífice a las parteras atentas y devotas. La partera tienen el deber de llamar de inmediato a un sacerdote, bautizar al niño que acaba de ver la luz del mundo, o de los contrario el bebé tendrá..." Pío XII no lo pronunció de forma explícita, tampoco habló ex catedra; sin embargo, insinuaba que el niño no bautizado y el nonato estaban condenados a la oscuridad abelardiana. Los teólogos conservadores afirmaron que el pontífice había asumido, sin duda alguna, de forma oficial la idea del limbo. Ningún Papa había estado tan cerca de convertir al limbo en doctrina.

En Varieties of Religión Today (2002), Charles Taylor menciona al limbo como una teoría cristiana -desde la perspectiva teológica- muy errática, si se tiene en cuenta que ya se conciben niños en probeta, mientras que otros embriones con alma, según la Iglesia, se congelan y quizá sean destruidos más tarde. ¿Cuál sería el destino de estas almas sin bautismo?

"Más allá de los enigmas que nos acosan cuando intentamos entender dos de los atributos de Dios: la omnipotencia y la infinita bondad -escribe Leszek Kolakowski- estos atributos son irreconciliables con la existencia del mal en el mundo". Una cantidad importante de cristianos -sobre todo los de las iglesias anglicana, católica, luterana, ortodoxa y presbiteriana- sostienen que el pecado original de Adán mancha el alma de todos los nonatos y los recién nacidos, No obstante, si se les interroga a fondo, la mayoría de los cristianos no cree que el recién nacido que fallece sin estar bautizado vaya a privarse de la gloria del Cielo. En el otro extremo, la mayoría de los miembros de las iglesias baptista, pentecostal y asambleas de Dios, no aceptan la doctrina del pecado original, y se niegan a concebir un Dios que haya marcado con el mal a los seres humanos. Como decía Jorge Luis Borges: la idea de un Dios sabio y todopoderoso y que, además, nos ama, es una de las creaciones más audaces de la literatura fantástica.

Insisto: ¿un católico de Ruanda, después del genocidio de más de un millón de seres humanos en su país, puede imaginar un infierno más aterrador? En serio: ¿no debería desaparecer también la idea del infierno?